En principio podría parecer que las parejas que están buscando un embarazo tienen más sexo y mejor. Es cierto que la idea es tener mucho sexo y además, por primera vez sin usar ningún tipo de anticonceptivo, pero no siempre es así de divertido. El estrés que puede crear las relaciones programadas y los mil consejos que podemos encontrar a la hora de concebir no ayudan a disfrutar de este periodo.

Quedar embarazada puede no ser fácil.

Embarazarse no es sencillo, sobre todo si lo deseas. Las mujeres solo son fértiles durante unos 6 días al mes; 4 días antes de la ovulación porque es el tiempo que puede vivir el espermatozoide en el útero, el día de la ovulación y el siguiente porque el ovulo solo vive 24 horas. Una pareja sana puede tardar hasta un año en concebir y es que por cada relación en los días fértiles solo hay aproximadamente un 25% de posibilidades de fecundación.

Lo primero que hace una mujer que desea quedar embarazada es tratar de conocer sus ciclos, saber cuándo ovula y determinar esa semana fértil. Para ello hace uso de la observación del moco cervical, de la temperatura basal, la posición del cérvix, los test de ovulación…métodos que pueden ser muy eficaces pero también son confusos de interpretar.

El estrés de la búsqueda

Toda pareja que comienza a tratar de concebir un bebé lo hace con la idea de no agobiarse y “que venga cuando quiera venir”, si tardan unos meses empiezan a pensar que conocer la semana fértil no hace daño y desde luego multiplica las posibilidades. Es cierto que saber los días fértiles y tener relaciones entonces ayuda a quedar embarazada pero no es cierto que todo este control “no haga daño”.

Y es que a partir de conocer la semana fértil empieza la programación de las relaciones, a intentar tener más sexo los días cercanos a la ovulación y frustrarse si en esa semana resulta que uno está de viaje, enfermo o por lo que sea no hay posibilidad de intimidad. La frecuencia recomendada, además, varía según quién te la cuente; unos dicen que todos los días, otros que día sí día no…

Si a pesar de esto no se logra el embarazo el estrés aumenta y se sacan otras armas. Encontramos consejos como posturas que favorecen la fecundación, posiciones a tomar justo después de la eyaculación, complementos vitamínicos que mejoran la salud reproductiva de ambos, lubricantes que contribuyen al transporte del esperma…

Muchas personas que están buscando un embarazo aseguran que su deseo sexual ha disminuido, así como la excitación y con ello, el disfrute.  Además altos niveles de estrés alteran el ciclo de la mujer y la calidad del esperma del hombre con lo cual el objetivo también se ve alterado.

Lee el siguiente post para descubrir Consejos para disfrutar del sexo en la búsqueda.

Marta Ibáñez Sainz-Pardo
Psicóloga especialista en terapia sexual y de pareja.



Abrir WhatsApp
1
¿Necesitas información?
Hola ¿En que puedo ayudarte?