En primer lugar quiero, una vez más, pedir disculpas por no haber actualizado el blog en tantos meses. El motivo efectivamente es el nacimiento de mi hijo y el nuevo orden de las cosas que ha precipitado. Por fin, meses después, parece que vuelvo a tener algo de tiempo y poco a poco retomo la actividad online (en la consulta trabajo justo desde las 16 semanas de vida del bebé, ¡viva la conciliación!).
Y es que la llegada de un bebé trastoca todo. Es un evento feliz y te aporta muchas cosas, pero es cierto que da la vuelta a todas y cada una de las facetas de la vida. No quisiera salirme mucho del tema que nos ocupa así que hoy os hablo de como cambia la sexualidad de la pareja.
La cuarentena.
…que no es tal. En realidad el tiempo a esperar antes de tener relaciones sexuales depende más de como se sienta la mujer físicamente que de otra cosa. Por supuesto si ha habido episiotomía, los puntos deben haberse caído ya y el médico debe dar su visto bueno pero esto puede ocurrir a los 40 días como a los 20 o a los 60.
No me gustaría detenerme mucho en estos momentos del reciente postparto porque la verdad es que, generalmente, por muy bien que esté la mujer físicamente, el sexo está en un plano alejado y no apetece nada de nada por mil razones; el vaivén hormonal, los horarios, el cansancio, las visitas, el estrés… Si hay alguna reciente mamá con alto deseo sexual en el primer mes por favor que comente.
El deseo sexual después de la cuarentena.
Cuando llegan mujeres a mi consulta con bajo deseo sexual y me dicen que tienen un bebé, les pregunto dos cosas; la edad del bebé y si dan el pecho.
Si el bebé tiene menos de 6 meses e incluso si tiene menos de 1 año, les digo que vuelvan en unos meses. Me dedico a esto y sé la importancia del sexo para una pareja, pero con un bebé tan pequeño creo sinceramente que todo tu cuerpo y tu cerebro está tan ocupados en la crianza que no cabe nada más y es que debe ser así y, por tanto, no es necesario meternos prisa para nada. Ya irá colocándose todo en su lugar. También os digo que es raro que tenga en consulta a recientes mamás, precisamente por esto que acabo de decir. Y cuando vienen es porque sus parejas las traen de la mano.
Sobre la lactancia siempre pregunto porque los efectos de la prolactina hacen que la lubricación vaginal disminuya y las relaciones sexuales sean más molestas y además porque el deseo sexual se inhibe naturalmente. Los animales que están criando no son fértiles así que, aunque los humanos tengamos relaciones independientemente de nuestro periodo reproductivo, en este momento suele pesar bastante. Hasta la naturaleza nos dice que nos centremos en criar al cachorro.
A partir del año ya se puede trabajar en el deseo sexual y la verdad es que lo ideal es que la pareja no haya desistido totalmente en las relaciones porque sino será como reencontrarse a nivel intimo con aquel señor con el que cuidas al bebé y eso puede ser duro.
Lo suyo es que la pareja haya logrado tener ciertos momentos íntimos en este primer año, sean o no con penetración, pero que sí que mantengan relaciones sexuales de una forma u otra. Esto en la mayoría de los casos sí se respeta, aunque generalmente no es con la frecuencia o en la manera que ambos desearían.
Problemas de tiempo y de autoestima.
Durante el embarazo las mujeres nos vemos raras, pero esa tripa enorme nos gusta; hay una persona dentro con la que tenemos la relación más especial del mundo. Damos a luz, la persona sale fuera y nosotras nos quedamos con una tripa vacía y extrañisima. Habremos ganado más o menos kilos y tardaremos más o menos en recuperarnos pero el cuerpo no llega a ser el mismo.
Además no dormimos tanto (excepto alguna afortunada) y no tenemos tiempo para arreglarnos como antes, para ir de compras o para hacer cosas que antes nos hacían sentir bien como el deporte, salir con amigas o ir al cine de forma improvisada. Y se nota; en las ojeras, en la apariencia de la piel y del pelo y en nuestro estado anímico.
Rara es la mujer que se siente bella en el primer año de maternidad. Feliz sí, pero bella no. Y entre el cansancio y que no nos sentimos deseadas la líbido baja y baja. Así que un buen consejo para los recientes padres es que traten de expresar más su atracción por la pareja.
El tiempo en pareja ya no es el mismo, otra vez insisto en que es distinto pero muy feliz, pero ya no podemos ver series en el sofá todo el día cuando llueve, o salir sin saber cuando volveremos a casa, no se puede hacer planes de aquí y ahora y sobre todo, sobre todo, no estamos solos. Por eso es esencial buscar esos momentos intímos, aunque sean 10 minutos cuando el bebé duerme para abrazarnos en el sofá en lugar de correr a la cama (a dormir) que es lo que nos pide el cuerpo. Y cuando sea más mayor o nos sintamos preparados, dejar al bebé con familiares para ir a comer un día al mes es una gran idea.
Continuaremos otro día que este tema da para largo…
Marta Ibáñez Sainz-Pardo
Psicóloga especialista en terapia sexual y de pareja.